MUTANTES EN JAPÓN

Evento perteneciente a Los Años del Cometa

A finales de 1864, uno de los fragmentos más grandes del cometa que atravesaron la atmósfera, se dirigió directamente a la isla de Hokkaidō, al norte de Japón. El meteorito que tenía un diámetro aproximado de 250 metros, impactó contra el centro del cráter de volcán Akan, perforando las capas de lava solidificada a su paso, hasta alcanzar el corazón del volcán. Tal impacto no llegó a producir una erupción ya que parece ser que el meteorito portaba una gran cantidad de hielo a su alrededor, y a medida que se abría paso, solidificaba la lava que dejaba atrás conteniendo la actividad volcánica en su interior. 

Ante tal visión, los "Ainu", dieron por echo que el "Kamui" del volcán los había protegido, y salvado. "Usui Horokeu" como agradecimiento al "Kamui" del volcán, erigió un altar en la falda norte del mismo, y quemó más de 10000 palillos de sauce, durante la semana que estuvo rezando en el altar. Este acto lo repitió año tras año, y cada vez se le unían mas "Ainu" a los rezos y quema de palillos de sauce, y se erigía cada año un "torī", todo para honrar al "Kamui" de volcán Akan.

En 1871, durante la celebración del festival de Akan; nombre con el que se había bautizado al evento; "Usui Horokeu" cayó al suelo entre convulsiones y espasmos produciendo así la parada del festival y centrando la atención en él. Algunos sanadores se acercaron para atenderlo, y tras recuperar la conciencia al día siguiente, lo único que dijo fue: "Sora no daiyamondo (Diamante del cielo)" y volvió a desmayarse. Pasaron varios días hasta que se recuperó y pudo caminar, pero desde que despertó la última vez no había vuelto a hablar. Una mañana se dirigió de nuevo hacia la falda del volcán donde había erigido el altar, y empezó a escarbar la falda del volcán creando un pasillo hacia el corazón del mismo. 

Durante la celebración del festival de Akan de 1872, "Usui Horokeu" salió de la madriguera que había escarbado en la pared del volcán con un objeto envuelto en sus manos, y volvió a hablar después de un año de silencio para volver a repetir "Sora no daiyamondo (Diamante del cielo)", acto seguido alzó sus brazos dejando al descubierto el objeto que portaba en sus manos, se trataba de un diamante en bruto de color azul celeste de un peso aproximado de 20 kg, por el cual al incidir la tenue luz del sol al atardecer emergían haces de luz azul.

La voz se corrió, los "Amui" de todos los rincones de Hokkaidō, acudieron al monte Akam a ver la piedra, para ello prepararon un festival en nombre de "Usui Horokeu", al cual tomaron como el elegido del "Kamui" del volcán por sus visiones y el hallazgo del regalo del cielo. Durante la noche del festival, prácticamente todos los "Ainu" de Hokkaidō se encontraban en la falda del volcán, y a eso de la media noche cuando la luna se encontraba en lo alto del oscuro cielo iluminando el "Sora no daiyamondo (Diamante del cielo)", depositado en el altar, la tierra tembló, se escuchó un trueno apagado que provenía del interior de la cueva que perforó "Usui Horokeu", un segundo trueno sonó desde la boca del volcán, tras lo que, una columna de vapor atravesaba el cielo hasta las nubes. Los "Ainu" buscando la protección del "Kamui" del volcán empezaron a rezar, mientras por la cueva salia una niebla blanquinosa que los rodeaba. Tras la columna de vapor, estalló el volcán en llamas, la nube de ceniza destruía todo a su paso arrancando árboles y rocas, la lava descendía por las laderas del volcán arrasando todo lo que encontraba a su paso, tan sólo la zona en la que se había erigido el altar estaba intacta, tal vez por la situación geográfica o tal vez por el "Kamui" del volcán.

Al día siguiente, la zona estaba arrasada, el santuario cubierto de cenizas de entre las cuales surgían criaturas desconocidas en este mundo, Todos los "Ainu" habían sufrido mutaciones por los vapores que emanaron del volcán. Algunos tenían el cuerpo cubierto por escamas, otros tenían la piel de color oscuro y de un aspecto que recordaba a un cuero curtido por los años, otros habían desarrollado una joroba y sus brazos y piernas se habían extendido, y entre ellos se alzó "Usui Horokeu" cubierto con los ropajes para no mostrar su forma, con el "Sora no daiyamondo (Diamante del cielo)", lo alzó sobre su cabeza, y partió del santuario en dirección a lo que quedaba de bosque, y el resto de mutantes lo siguieron. 

No tardó mucho tiempo en oir hablarse de los "Tengu", de esas criaturassobranaturales que cazaban humanos en la isla de Hokkaidō.